En la cocina mediterránea se utilizan muchas especias, pero una de las más comunes es el orégano. Es una hierba seca que se usa en una amplia variedad de platos mediterráneos, incluyendo pizza, pasta, ensaladas, salsas y guisos.

Otras especias populares en la cocina mediterránea incluyen el tomillo, la albahaca, el romero, la mejorana, el comino, la pimienta negra y la ajo. Estas especias se mezclan entre sí, obteniendo sabores complejos y aromáticos, que caracterizan la comida mediterránea.

En resumen, el orégano es una de las especias más empleadas en la cocina mediterránea, pero hay muchas otras especias que también se utilizan para dar sabor y aroma a los platos.